Pasos, voces y misteriosas apariciones son solamente algunos de los fenómenos extraños que se dan en el antiguo convento de la Concepción de Olivenza (Convento San Juan de Dios). Da a entender que es un lugar embrujado, y el porqué lo vamos a descubrir ahora.
Historia
La historia de este edificio religioso comienza en el siglo XVI cuando Leonor Velha, una dama de la alta burguesía, decide invertir en la construcción de un convento de monjas en esta localidad. El comienzo de las obras sufrió grandes retrasos y no fue hasta 1601 cuando comenzaron, inaugurándose 30 años después por el obispo de Elvas (Portugal). En el año de 1631, las hermanas Clarisas se asientan en el convento, pero no fue por mucho tiempo. Estalló la Guerra de Restauración por la que Portugal se separa de la corona de Felipe IV, lo que hace que las monjas sean sustituidos por los Monjes Hospitalarios de San Juan de Dios que lo convierten en Real Hospital Militar.
Durante dos siglos se debió impregnar en sus paredes el miedo, el dolor y la desesperación de los soldados que estaban al filo de la muerte que poco después fallecían por falta de recursos y eran enterrados en el mismo convento.
Durante la Guerra Civil Española, en 1936, el convento fue convertido en cuartel de la Guardia Civil y sus paredes fueron testigos de fusilamientos. Dicen que muchos cadáveres fueron arrojados a un pozo y otros enterrados en unas improvisadas zanjas.
El edificio pasó bastantes años abandonado, hasta que fue restaurado para albergar la Escuela de Teatro y de Danza de Extremadura en 1998. Mientras se hacían las obras de restauración salieron a la luz una gran cantidad de restos de personas.
Al poco tiempo de la inauguración de la escuela, numerosas personas fueron testigos de una serie de fenómenos paranormales.
Fenómenos paranormales
Un día, varios alumnos que asistían a sus clases de teatro en horario vespertino, en un momento pudieron ver que en el telón, una sombra de una persona que parecía acariciar la tela. Tras asomarse detrás pudieron comprobar que no había nada ni nadie. A partir de este momento se empezó a saber que no era la primera vez que sucedían este tipo de hechos.
Otro testimonio fue el que dio la entonces jefa de estudios de la escuela, quien afirmó que algunos días que se quedaba hasta tarde trabajando y entrada la noche había podido percibir voces extrañas por los pasillos y sombras cruzando el umbral de su puerta.
Según el testimonio de Ángeles Saavedra, administrativa de la escuela de arte: «Yo me asomaba a la puerta del aula y no había nada pero notaba que pasaban sombras. A veces llamaban a la puerta y cuando abríamos allí no había nadie».
Muchos más fenómenos extraños se hicieron notar en el antiguo convento, como un reloj que detenía siempre sus manillas a la misma hora, sombras inquietantes y extrañas apariciones en el aula de ensayo, el canto de una soprano o el llanto de un misterioso bebé.
Sin duda por todo estos testimonios, podemos decir que nos encontramos ante un lugar embrujado, seguramente por haber tenido un pasado lleno de muerte, quizá esta actividad paranormal es fruto del clima tan negativo presente en el edificio y que el dolor de muchos fallecidos siga vivo hoy en día.